Hallazgos físicos (lesión SLAP):
La exploración física:
- A menudo es inespecífica debido a otras anomalías intraarticulares asociadas.
Ni una prueba ni una combinación de pruebas:
- Ha demostrado tener una sensibilidad, especificidad o valores predictivos positivos aceptables para diagnosticar lesiones SLAP.
- La sensibilidad y la especificidad son relativamente bajas para las pruebas individuales y las combinaciones.
Pruebas generales de exploración física para detectar lesiones SLAP:
- Puede utilizarse para reforzar el diagnóstico, pero la decisión de tratamiento quirúrgico no debe basarse únicamente en la exploración física.
- Las pruebas incluyen:
- Prueba de velocidad.
- Prueba de Yergason.
- Prueba de compresión activa (O’Brien).
- Prueba de reubicación Jobe.
- Prueba de manivela.
- Maniobra de Aprehensión Anterior.
- Sensibilidad en el surco bicipital.
- Prueba de deslizamiento anterior (Kibler).
- Prueba de rotación de compresión.
- Prueba de provocación del dolor.
- Prueba de carga del bíceps II.
- Las pruebas incluyen:
Procedimientos de pruebas diagnósticas (lesión SLAP):
Radiografías:
- Suelen ser normales en las lesiones SLAP aisladas.
- Puede ser útil para identificar otras fuentes de anomalías.
Resonancia magnética (RM) con artrograma:
- Es el más preciso tanto para el diagnóstico como para la clasificación de las lesiones SLAP.
- Puede ser difícil diferenciar las lesiones SLAP, especialmente las de tipo II, de las variantes anatómicas normales y los cambios asintomáticos relacionados con la edad.
c.iii Evaluación artroscópica:
- Es la prueba diagnóstica más definitiva.
Procedimientos de tratamiento no quirúrgico (lesión SLAP):
- La mayoría de las lesiones SLAP están asociadas a otras patologías, y el tratamiento debe tener en cuenta los protocolos para estas afecciones.
Medicamentos:
- Tales como analgésicos y antiinflamatorios pueden ser útiles.
Procedimientos terapéuticos:
- Puede incluir instrucción en ejercicios terapéuticos, técnicas de trabajo adecuadas y evaluación del puesto de trabajo ocupacional.
Pueden obtenerse beneficios mediante la rehabilitación terapéutica:
- E intervenciones de rehabilitación que incluyen la amplitud de movimiento (ROM), terapias activas y un programa de ejercicios en casa.
- Pueden utilizarse terapias pasivas y activas para controlar el dolor y la inflamación.
- La terapia debe progresar hacia el fortalecimiento y un programa independiente de ejercicios en casa dirigido a mejorar aún más el ROM y la fuerza de la musculatura de la cintura escapular.
Inyecciones subacromiales bursales y/o glenohumerales de esteroides:
- Puede disminuir la inflamación y permitir el progreso con ejercicios funcionales y ROM.
- Tiempo para producir efecto: Una inyección.
- Duración máxima: Tres inyecciones en un año con un intervalo mínimo de 4 a 8 semanas.
- Las inyecciones de esteroides deben utilizarse con precaución en pacientes diabéticos, y los niveles de glucosa en sangre deben controlarse diariamente durante dos semanas después de las inyecciones.
Vuelta al trabajo:
- Con las restricciones apropiadas debe considerarse al principio del curso del tratamiento.
Otras terapias no quirúrgicas:
- Puede emplearse en casos individuales.
Indicaciones quirúrgicas:
- Existe una cantidad significativa de variación anatómica normal en el labrum glenoideo superior y el origen de la cabeza larga del tendón del bíceps.
- La diferenciación entre variación normal y patología es crucial.
Si se sospecha una lesión SLAP:
- Debe realizarse un examen artroscópico junto con el procedimiento quirúrgico primario.
- En caso necesario, deberá efectuarse una reparación adecuada. o
Cuando no se identifica ninguna patología adicional:
- Y hay una respuesta inadecuada a al menos tres meses de tratamiento no quirúrgico con participación activa del paciente.
- Evidenciado por dolor continuado con limitaciones funcionales y/o inestabilidad que afecta significativamente a las actividades diarias o a las tareas laborales.
Antes de la intervención quirúrgica:
- El paciente y el médico tratante deben identificar los objetivos operativos funcionales.
- Debe evaluarse la probabilidad de lograr una mejora de la capacidad para realizar actividades de la vida diaria o laborales.
- El paciente debe aceptar cumplir el plan de tratamiento pre y postoperatorio y los requisitos de ejercicio en casa.
- El paciente debe comprender la duración prevista de la incapacidad parcial y total tras la operación.
- El paciente también debe comprender que el tratamiento no quirúrgico es una opción aceptable, y que una posible complicación de la cirugía es la rigidez del hombro con dolor y posiblemente disminución de la función.
Procedimientos quirúrgicos (lesión SLAP):
- El tratamiento quirúrgico depende del tipo de lesión presente y de la presencia de otras anomalías intraarticulares.
Tipo I:
- El desbridamiento es razonable pero no obligatorio.
Tipo II:
- La reparación mediante anclajes de sutura o tenotomía/tenodesis del bíceps son opciones razonables.
Tipo III:
- El desbridamiento o la escisión del componente del asa de cubo por sí solos o la reparación mediante anclajes de sutura o tenotomía/tenodesis del bíceps son opciones razonables.
Tipo IV:
- El desbridamiento y/o la tenotomía o tenodesis del bíceps son opciones razonables.
Tratamiento postoperatorio (lesión SLAP):
- Los programas de rehabilitación postoperatoria deben individualizarse en función de si se han tratado quirúrgicamente otras anomalías intraarticulares.
- La información disponible sobre la rehabilitación de las lesiones SLAP aisladas es limitada.
- Los cuidados postoperatorios habituales consisten en llevar un cabestrillo sin movimiento activo del hombro durante 4 a 6 semanas.
- Durante este tiempo, pueden realizarse ejercicios de amplitud de movimiento (ROM) del codo, la muñeca y la mano.
- El cabestrillo se retira a las 4 o 6 semanas, y normalmente se inicia la movilidad activa con las restricciones indicadas por el cirujano.
- Es razonable restringir la rotación externa y la abducción hasta seis meses después de la operación.